Los grupos municipales de la Corporación de Los Corrales de Buelna se preparan para debatir sobre la futura gestión del Teatro Municipal, ante el próximo fin del contrato de adjudicación del servicio firmado hace ahora ocho años. La forma en la que se renovará el contrato o la posibilidad de prorrogar el actual otros cuatro años ha sido ya motivo de las primeras declaraciones encontradas entre gobierno y oposición.

De momento, el presidente de la Comisión de Cultura, Valentín Aguado Quintial (PP), ya ha avanzado que el gobierno municipal prepara desde finales del año pasado las bases que regularán el nuevo contrato, aunque no ha querido dar más detalles sobre ese documento. Lo que si hizo fue criticar el que desde la oposición ya se hayan lanzado las primeras críticas “sobre una supuesta inactividad por nuestra parte cuando saben perfectamente que ya se está estudiando un nuevo borrador”.

Lo cierto es que el gobierno que preside Mercedes Toribio (PP) ya incluyó el teatro en los planes de ahorro de la pasada legislatura, recortando gastos y dando forma a una nueva ordenanza para cobrar la utilización de esa instalación a los grupos o entidades que lo soliciten. La avalancha de peticiones para utilizar el edificio, en sus distintas salas, llevó al Ayuntamiento a aprobar una ordenanza fiscal que regula desde el 1 de enero su utilización. Entre los cambios más significativos está el de establecer un canon por su uso, siempre que las peticiones tengan una intención lucrativa, es decir, que exijan el paso previo por taquilla, estableciendo un precio por jornada de entre 250 y 300 euros. Ahora el debate va mucho más allá, afectando a la gestión total, incluido el personal que atiende el teatro.

El nuevo portavoz del Grupo Municipal Regionalista, Luís Ignacio Argumosa Abascal, se ha estrenado en un asunto que conoce muy bien, la renovación del contrato de gestión del Teatro Municipal. Ayer mismo afirmó que, ante la extinción del contrato, el Ayuntamiento, dijo, tendrá que replantearse qué y cómo quiere la continuidad de ese servicio. Señaló que el contrato, firmado siendo el mismo presidente de la Comisión de Cultura, tiene la opción de prorrogarlo por cuatro años más, pero, adelantó, para eso habrá que sentarse todos los grupos del Ayuntamiento y llegar, si se puede, a una opción común, “me atrevo a decir que no se puede tomar ninguna decisión sin contar con la oposición”. Y anunció que su intención es reunirse con los grupos que utilizan el teatro, coral o escuela de teatro, y la empresa que lo gestiona actualmente.

Recordó que en la pasada legislatura los cuatro grupos municipales presentes en aquella Corporación también se mostraron de acuerdo en la necesidad de regular el uso del Teatro Municipal, elaborando un reglamento que no solo permitirá un correcto uso de cada sala sino que pondrá las bases para una mejor utilización de las instalaciones y la ampliación de las actividades programadas.