Manuel Gómez Sánchez se ha propuesto encarrilar las muchas quejas que a diario se repiten entre los vecinos y usuarios de la calle Torres Quevedo de Los Corrales de Buelna al atravesar el peligroso paso a nivel de esa calle, más por los vehículos a ruedas que por el medio centenar de trenes que atraviesan ese punto cada día. Muchos más son los camiones de grandes dimensiones que circulan por esa calle, los autobuses que se dirigen hacia colegios e institutos y los vehículos privados que se encaminan hacia las instalaciones deportivas municipales o a sus viviendas.

Manuel Gómez lo que pretende es recoger suficientes firmas para que alguien tome cartas en el asunto y de seguridad al céntrico paso a nivel, incorporando un tramo exclusivo para peatones que evite accidentes como los que ya han ocurrido en ese lugar. Mayores que han caído a las vías, niños rozados prácticamente por los vehículos que se cruzan, un peligro que se recrudece a primera hora de la mañana, en las entradas a los centros educativos, especialmente en invierno y de noche, decía.

Las firmas se acumulan ya ‘exigiendo’ un paso peatonal en ese tramo y una solución al tránsito de tráfico pesado por la calle Torres Quevedo, una de las principales vías del casco urbano, según reza la motivación previa del escrito a firmar.

En ese documento se detalla que son más de 70 los camiones articulados de gran tonelaje que pasan diariamente, más de una decena los autobuses escolares, vehículos de distintos servicios y coches particulares, todos atravesando un paso estrecho y sin ninguna protección para el viandante. Y apunta dos cuestiones añadidas, por una parte la frecuente rotura de las semibarreras automáticas y por otra la dificultad de paso para las personas con movilidad reducida.

Como soluciones, propone el escrito las necesarias obras en ese paso para dar seguridad a los peatones (una solución similar a la aplicada en el paso a nivel de la Avenida Forjas de Buelna) y el regular la circulación de grandes camiones para que no coincidan con las horas de entrada y salida a los centros educativos.

Algunas comunidades de la calle ya tienen en sus vestíbulos la hoja explicando la situación, bien conocida por los vecinos, y las intenciones, pidiendo la firma de todos los inquilinos.

La instancia se llevará al Ayuntamiento y se reclamará una actuación que, según contaba Gómez Sánchez, la Administradora de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha declinado por no ser de su competencia.

Además de edificios y viviendas, se ha puesto en contacto con el colegio público de Educación Infantil y Primaria Gerardo Diego y con el Instituto de Enseñanza Secundaria María Telo, con la dirección y las asociaciones de madres y padres, dos centros con una mayoría de alumnos que tienen que utilizar la calle Torres Quevedo para acceder y salir de los recintos educativos. Hay acuerdo sobre la necesidad de tomar medidas e incluso se proponen, esos colegios, apoyar la iniciativa con un escrito propio.

También quiere contar con el apoyo del comercio de Los Corrales de Buelna, habilitando lugares donde recoger un mayor número de firmas para presionar a las autoridades a tomar una decisión sobre el tema.

Ya ha hablado con el alcalde, Luis Ignacio Argumosa Abascal, e incluso con el Jefe de la Policía Local, Tomás Gutiérrez, ambos concienciados con ese peligro, el primero por vivir cerca y el segundo al reconocer que es uno de los puntos negros de seguridad del tráfico en el municipio.