Visitamos Bostronizo, el balcón del municipio de Arenas de Iguña, a 430 metros de altitud, y donde dicen que el sol tiene un idilio permanente con esta bella localidad del Valle de Iguña. Bostronizo es luz teñida de enormes extensiones verdes a su alrededor.
Sus rutas y senderos llevan al caminante a lugares como la Ermita de San Román de Moroso, a 3.500 metros, o al centro geográfico de la región, ubicado en Anievas a dos kilómetros. María José, Manuel, Gema y Vicente, este último alcalde pedáneo, nos hablaron de cómo viven la pandemia en el pueblo y como contemplan el inevitable final de la misma.
(En el reproductor, las opiniones de nuestros protagonistas, vertidas en La Farola)
Antonio Pérez (foto)