Los dos institutos públicos de Enseñanza Secundaria de Los Corrales de Buelna han abierto sus puertas durante esta semana para mostrar a los futuros alumnos su oferta educativa, instalaciones, profesores y atractivos proyectos, intentando captar el interés de los estudiantes y sus padres. Los IES Javier Orbe Cano y Estelas de Cantabria lo hacen sin ambages, poniendo sobre la mesa sus mejores virtudes para ser, a la postre, el elegido el próximo curso. Sus equipos directivos dejan claro que lo hacen sin enfrentarse, sin rivalidad, con la única intención de ofrecer más información para tomar la mejor decisión. Conscientes de que son muchas las similitudes entre ambos, pero evidenciando las importantes y evidentes diferencias a la hora de enfocar los próximos cuatro a seis años de la vida de los estudiantes que optan por pasar de nivel en la Educación.
Bien es cierto que las dos directoras, Paz Sasián del Estelas y Pilar Lobeto del Orbe Cano, tienen claro que a la hora de tomar una decisión la balanza se inclina mucho hacia el lado del centro que eligieron hermanos, amigos o vecinos, con más peso que las ventajas educativas de cada instituto. Eso y la decisión de los padres, que a la postre también cuenta. Por eso las jornadas de puertas abiertas se destinan a los dos frentes, a los alumnos de sexto de Primaria, inmediatos candidatos a la Secundaria, y a sus padres y tutores. No será la única oportunidad para comprobar su oferta, pero si la más intensiva.
En cuanto a los padres, el IES Orbe Cano se estrenó el martes con una jornada de tarde en la que se invitó a los padres a escuchar las ventajas del centro contadas por otros padres más que por el equipo directivo, escuchar y preguntar sobre distintos temas de interés, como el control, proyectos, salidas, etc. Y el IES Estelas lo hará en la tarde del miércoles, también con jornada especial para los padres.
Mientras, las mañanas se dedican a los alumnos de sexto de Primaria de los colegios Pereda y Gerardo Diego de Los Corrales de Buelna, Pero Niño de San Felices de Buelna y Torres Quevedo del valle de Iguña. En el caso del Orbe Cano también se apuesta por los alumnos del centro para contar su experiencia y contestar las preguntas de los que hasta el curso pasado fueron sus compañeros de colegio. Pilar Lobeto explicaba ayer que la intención es "no abrumarles con demasiada información, y sí quitarles el miedo a una transición con más aspectos comunes, entre colegio e instituto, que diferentes, "y para explicar eso nadie mejor que los alumnos que el curso pasado estaban en el otro lado". "Si lo hacemos solo nosotros podemos no llegar a sus preocupaciones y miedos", decía.
Para Paz Sasián hay que hacer un esfuerzo porque los alumnos de sexto aún son muy jóvenes y su inclinación depende más de las instalaciones, "del gimnasio, de los laboratorios, las aulas especiales, ordenadores e incluso la cafetería". Por eso enseñan a los visitantes el otro lado del centro, su oferta, sus proyectos, sus éxitos, y refuerzan esa invitación con los padres "porque también tenemos mucho que decir".
Todo ello sin olvidar que existe una tercera opción, la del centro concertado de La Salle, que basa su oferta, entre otras cuestiones, en la larga experiencia que da su centenaria historia en la formación profesional. En total, más de un millar de plazas de Enseñanza Secundaria en Los Corrales de Buelna. Suficiente donde elegir.
