El alcalde de Bárcena de Pie de Concha, José Félix de las Cuevas (PP), falleció en la mañana del martes a los 83 años de edad en su domicilio, no muy lejos del Ayuntamiento, su otra casa, después de una larga carrera política dedicada a sus vecinos.

El alcalde más veterano de Cantabria y uno de los más experimentados de España ha sido calificado por sus compañeros de fatigas políticas como un hombre “entrañable, cercano y muy querido por todos”. Así lo decía la alcaldesa de Los Corrales de Buelna, Mercedes Toribio, quien lamentaba profundamente la pérdida de un “buen hombre”.

En término semejantes se pronunciaron alcaldes y políticos de la zona. A la mano derecha del alcalde, Carmen Mier, apenas le salían las palabras. Era algo más que su amigo y padre político, era un “referente”. Como teniente de alcalde señaló que el velatorio estará instalado en El Alisal, en Santander, para mostrar sus respetos a la familia. Y mañana miércoles será su funeral, en la iglesia de San Cosme y San Damián de Bárcena de Pie de Concha, a las cinco de la tarde, para ser trasladado posteriormente al panteón familiar en el cementerio de su pueblo.

Carmen Mier y el primer teniente de alcalde, Agustín Mantecón, agradecieron las muestras de dolor llegadas al Ayuntamiento de Bárcena de Pie de Concha durante toda la jornada, recordando al que ha sido desde el inicio de la democracia alcalde de su pueblo. Incidieron en que se han decretado tres días de luto oficial en el Ayuntamiento.

José Félix de las Cuevas comenzó su carrera política en el año 1955. En las primeras elecciones democráticas concurrió con la UCD, Alianza Popular y después el Partido Popular, siempre, hasta esta legislatura, con mayoría absoluta. En mayo del año pasado las urnas le obligaron a demostrar su habilidad política, pactando con el PRC tras perder la mayoría, continuando como alcalde.

Se fue, según sus amigos, como hubiera elegido: de repente, sin dolor, pero sobre todo, con las botas puestas, siendo alcalde de los suyos, su gran devoción. Un buen amigo, Ramón Morais, recordaba ayer que antes de las pasadas elecciones le preguntó: “¿Pepín, no será demasiado ya para ti? Sonrío. Tengo muchas cosas, muchos proyectos que hacer todavía, y tengo que terminar algunas cosas que tengo iniciadas. Cuando las termine, me lo pienso”. Todo cambió alrededor de el en el último medio siglo. El que no cambió fue él. Descanse en Paz.