(Audio resumen de la intervención de González Linares en Radio Valle de Buelna).
José Antonio González Linares ha cargado hoy contra la orden de Sanidad de prohibir la misma cabalgata que se había organizado en San Felices de Buelna ya el año pasado, una comitiva con los Reyes Magos a caballo sin más acompañantes y sin paradas, con un largo recorrido por el municipio para que los niños pudieran ver a Sus Majestades desde las ventanas, balcones o las puertas de sus casas. "Una solución segura que no quieren ver los supuestos especialistas, que lo que hacen es proponer cabalgatas estáticas, que entrañan mucho más riesgo de contagio", aseguró el alcalde. "Nos están robando la ilusión de los niños y eso no se recuperará", afirmó.
El regidor recordó que el año pasado ya tuvieron el mismo problema pero se solucionó al comprobar que "nuestra propuesta era mucho más segura que concentrar a los niños en lugares concretos. Ahora nos lo prohíben y nos recomiendan organizar aglomeraciones, porque eso es lo que cualquiera entiende que va a pasar en cabalgatas estáticas, y no estoy dispuesto a hacerlo, no puedo poner en peligro la salud de los vecinos".
También criticó el que no se haga nada en actos masificados en mucho lugares, "mientras en un pueblo como éste, con apenas 2.000 habitantes, dejan a los niños sin su mayor ilusión, y a nadie parece importarle la ilusión, la inocencia de los niños ante los Reyes, la mayor magia en la vida de cualquier persona tirada por tierra".
"Estoy absolutamente desilusionado con personas a las que se pide una mayor preparación, porque si no solucionan estas cuestiones como van a solucionar los grandes problemas que tenemos en la región o en España".
José Antonio González Linares también se preguntó el "¿por qué no se han reunido con los alcaldes para compartir criterios?, ¿por qué aplican las mismas medidas en ayuntamientos como Santander y San Felices de Buelna con propuestas bien diferentes?".
En referencia a las cabalgatas estáticas afirmó que "es una barbaridad que pretenden imponernos, pero nosotros no pasaremos por ahí, no pondremos en peligro la salud de los vecinos con gran dolor de corazón, porque lo que consiguen es quitar la ilusión a los niños". "No son valientes para prohibir directamente, lo dejan en manos de los ayuntamientos para que nosotros carguemos con las culpas de técnicos que no dan la cara", aseguró. El alcalde reconoció que no incumplirá las normas porque "somos gente seria" pero aseguró que "no hay alternativa porque no podemos hacer algo en lo que no creemos".
Terminó reconociendo que sentimos muchísimo la decisión que nos toca adoptar, apoyamos el trabajo de Sanidad con la pandemia, pero, en este terreno, me parece muy triste. Estamos en manos de gente que no hace bien su trabajo".
