Un árbol podrido no pudo aguantar las ráfagas de viento y cayó sobre la piedra, rompiéndola en varios fragmentos Jueves, 17 Septiembre 2015 Un árbol podrido no pudo aguantar las ráfagas de viento y cayó sobre la piedra, rompiéndola en varios fragmentos

Los últimos vendavales dañan la réplica de la estela de Barros

Los últimos vendavales han provocado la caída de un árbol sobre la réplica de la Estela de Barros que se levantaba en el parque dedicado a esas grandes piedras de culto celta en el centro de la localidad, causando desperfectos que serán difíciles de reparar, según reconocieron ayer desde el Ayuntamiento de Los Corrales de Buelna. De momento el equipo de gobierno estudia estos días con los técnicos qué respuesta dar para preservar ese parque dedicado a las estelas cántabras halladas en el valle.

Así lo explicó ayer la concejala de Servicios Municipales y Medio Ambiente, Isabel Fernández Quijano, al adelantar que la primera medida ha sido retirar tronco y ramas del tilo roto por el viento para después cortarlo de raíz y plantar en su lugar otro árbol. Por su parte la alcaldesa, Josefina González, señaló que sobre el futuro de la pieza fracturada se ha preguntado al autor de las réplicas, el escultor Antonio Vuelta, para conocer su opinión antes de tomar ninguna decisión.

La daños causados en la piedra son «muy difíciles sino imposibles de reparar» adelantaba Isabel Fernández, aunque también aclaró que habrá que esperar a lo que diga el escultor. Recordó que la intención de contar con copias de las estelas al aire libre lo más parecidas a las originales llevó a Antonio Vuelta, afincado en Los Corrales, a utilizar el mismo material, piedra arenisca, una base que no aguantó el impacto del árbol al caer sobre esa estela.

Examen de los árboles

La concejal también adelantó que se pondrá en manos de técnicos la elaboración de un informe sobre el estado de salud de los tilos que bordean el parque de las estelas, paralelos a la Avenida Cantabria. Ya son varios los que han sucumbido a las últimas ráfagas de viento y en su mayoría han presentado claras muestras de estar podridos por dentro, con el peligro que ello conlleva de que puedan caer hacia las aceras o la carretera, y no hacia el parque como sucedió esta semana. Algunas de las personas que comprobaban ayer los daños lo dejaban muy claro: «mejor que haya roto una piedra que no una cabeza».

El parque de las réplicas de las estelas, junto a la Casa Consistorial, se ha convertido en uno de los puntos más visitado de Los Corrales de Buelna, un valle en el que se han encontrado las cinco piedras que se reproducen en el parque a tamaño natural. El hecho de que cuatro de las originales estén en Santander y otra encerrada en el Parque de las Estelas lleva a muchas personas a acercarse para ver las copias.

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