La Concejalía de Obras e Infraestructuras del Ayuntamiento de Los Corrales de Buelna ha tenido que afrontar un nuevo modificado del proyecto de reurbanización de la plaza de la Constitución debido a la mala salud de los árboles que marcan el perímetro del lugar y la intención de mantenerlos en su mayoría en el diseño futuro de ese foro. Una modificación que supondrá retirar más de una veintena de árboles, la doble fila completa que se levantaba paralela a las antiguas escuelas. Se desecharán los muertos y se aprovecharán los que estén en un estado aceptable para sustituir a otros más dañados dentro de la misma plaza. Y para el lateral que queda sin árboles el Ayuntamiento ha adquirido 35 nuevos plátanos.

El presidente de la Comisión, Serviliano González, explicó las dificultades que se han encontrado a la hora de mantener el proyecto original, retirar 31 árboles muertos de los más de 90 que bordean en dos filas la plaza y reponerlos por otros jóvenes. Y es que los técnicos han adelantado que no era posible dado que los árboles nuevos no son de la misma altura que los plátanos actuales y el efecto de entramado de las ramas que se quiere dar al pasillo que formarán los árboles paralelo a los lados de la plaza no se lograría.

Así que se ha optado por una actuación mucho más contundente, retirar las dos filas de uno de los lados del triángulo que forma la plaza, el que da a las antiguas escuelas, para plantar en toda esa hilera plátanos nuevos. Los que se retiren en buen estado servirán para sustituir a los árboles muertos que se eliminen de los otros dos laterales, el de la Avenida Cantabria y el de Condesa Forjas de Buelna. Con lo que sí se logrará que las tres dobles filas de la plaza tengan la misma altura.

Para ello el Ayuntamiento ha formado un equipo que integran los técnicos del Serca, la empresa encargada de parques y jardines, con personal propio y maquinaria contratada al efecto. Todo desde ayer lunes para no entorpecer la labor de urbanización que está llevando la empresa adjudicataria de la obra.

El Serca ya había presentado un informe sobre el estado de salud de los 94 árboles que se levantaban en el lugar. Tres fueron retirados para modificar la esquina norte de la plaza y como estaban en buen estado se trasplantaron en Barros.

De los 91 restantes, el informe técnico señala que ninguno goza de buena salud. En una situación regular se encuentran 34 (32%), en mal estado 26 (25%) y en muy mala situación 31 (29%). El informe detalla que se tratarán aquellos que están en situación regular o mala, para que aún puedan durar unos años. Y se retirarán los 31 en mal estado, lo que ha provocado el cambio del proyecto y la compra de 35 nuevos ejemplares. De ellos 28 se plantarán junto a las antiguas escuelas.

La nueva situación ha servido para dar más explicaciones sobre el resultado final que se espera de una plaza que contará con iluminación a distintas alturas y un suelo de baldosas especiales reflectoras de luz que incrementarán la sensación de claridad. Se respetarán los bancos de piedra actuales recubriéndolos con madera y se colocarán otros nuevos. Habrá papeleras en cada esquina y protección de cara a las carreteras que bordean la plaza. El nivel de la calle Constitución, que pasará a ser peatonal, se igualará con la plaza para dar una sensación de continuidad, y se repondrán el buzón de correos y la cabina telefónica, además del tablón de anuncios.