Los afectados por la Ley de Montes en Cartes se han cansado de esperar en casa una solución a sus reivindicaciones y han retomado su protesta a jornada completa en los arcos del Ayuntamiento de la villa, pernoctando al aire libre y asegurando que esta vez no cejarán en su empeño hasta que se les dé una contestación definitiva. Se sienten "engañados y ninguneados" por las administraciones local y regional. Engañados porque a finales del pasado año les prometieron una solución que no ha llegado. Ninguneados porque desde ningún estamento se les ha explicado cuál es la situación actual de sus expedientes, si hay esperanza o se descarta ya el conceder la propiedad de las parcelas que poseen en terrenos de utilidad pública afectados por la nueva normativa. Desde el Ayuntamiento, el alcalde ha asegurado que la competencia es de la Dirección General de Montes y que "se sigue peleando por hallar una solución favorable".

Miguel Marañón García, Amalia Marañón Martínez y Fernando González Rodríguez son la cabeza de la reivindicación y los primeros que han instalado sus camas en los arcos del Ayuntamiento, además de enseres de primera necesidad, una estufa de gas y una lona para protegerse del frío especialmente durante las noches. Esperan que se les vayan sumando el resto de afectados, igual de enfadados con la falta de respuesta de la administración. Solos o acompañados mantendrán su protesta incluso durante las próximas navidades si esa respuesta, para bien o para mal, no llega antes.

El alcalde, Bernardo Berrio, aseguró que desde el Ayuntamiento "seguimos apoyándoles y trabajando para que se solucionen los expedientes cuanto antes", pero explicó que la competencia en este caso es de la Dirección General de Montes, que está siguiendo el proceso e incluso estudiando la posibilidad de reabrir algunos de esos expedientes. Berrrio aseguró que "seguimos pelando porque salgan bien las cosas", y recordó que de 64 afectados, en 28 se ha llegado a un acuerdo y en otros casos se han estimado las reivindicaciones parcialmente.

La gota que ha colmado el vaso ha sido la discrepancia entre los informes realizados por una persona especializada contratada por el Ayuntamiento y los elaborados por los técnicos municipales. Los expedientes de Marcos Pereda, contratado por el gobierno local, tendrían que haber sido confrontados y confirmados por los técnicos municipales para afianzar la reivindicación de los afectados, "pero ha sido al revés, los informes técnicos son contrarios a nuestras reclamaciones, dejando sin valor los documentados expedientes de Pereda", dijo Miguel Marañón. Y repartió culpas entre todos los grupos municipales de la Corporación, "todos iguales en no hacernos ni caso, hasta tal punto que ahora nos reciben en los arcos, ya ni en sus despachos". Y añadió que "no nos han dejado ni un enchufe para conectar una estufa".

El portavoz de los afectados, José Luis Rubio, ya avanzaba hace unos días su enfado. "Estamos hartos de esperar y de que nos tomen el pelo", dijo, al relatar que en varias ocasiones se ha dirigido a la Dirección General de Montes para pedir explicaciones sin que se le hayan dado respuestas concretas "y menos esperanzadoras, todo lo contrario".

Es la tercera vez en dos años que los afectados vuelven a la carga. La última duró 11 meses y terminó a finales del año pasado. Ahora vuelven a la carga "porque estamos igual que estábamos, nadie nos hace caso, nos dan largas y estamos como si fuéramos un árbol de Navidad", decía Fernando González.

Amalia Marañón aseguró que "estaremos día y noche hasta que nos hagan caso".